>>1
Es que lo que está mal es la sociedad. En la medida que una persona no importune a las otras, ¿qué problema podría haber con que una persona adultere su apariencia, o se perciba de otro modo?
Los políticos saquean a la gente para la que dicen trabajar y viven mintiendo. Pero la sociedad lo sabe y no pasa nada. En un régimen de tiranía, no se puede criticar al mandatario sin castigo por tal crítica. Hoy día, en los lugares con democracia, se puede criticar al mandatario sin que a éste o al crítico le pase nada.
Pero un hombre se pinta los labios y se pone tetas y, a menos que se trate de una persona del mundo del espectáculo, es sindicada como una aberración, una anomalía, algo desagradable. Es kafkiano, me recuerda al cuento de la metamorfosis.
Pero si consigue una persona un grupo de pertenencia en el cual refugiarse y sentirse admitido y contenido, aún en esas arduas condiciones la vida puede ser digna de ser vivida.

ah disculpa no lei el post entero

Bueno, igual >>2 ¿dónde residirá? ¿cuán intolerante o anti LGTBQ+ será "su" sociedad?
A veces no nacemos dónde queremos. Y los que nos rodean pueden tener creencias trasnochadas. Pensemos en esos árabes talibanes que disparan ráfagas de balas cuando oyen que las personas ponen música para celebrar un evento. "Porque el profeta dice que la música es demoníaca". Y capaz que el profeta era FURRO OBESO disfrazado, para hacerles una joda, por sacoweas valedores de callampa. Y los muy weones cultores del dogma se chupan el pico entre ellos y fuera de las carpas se jactan de mutilar clítoris y violar colegialas, condenándolas a la ignorancia al prohibirles educarse, conducir, trabajar, vestirse mostrando sus pies, hombros, manos, cabellos, la boca y aún los ojos.
Pero bueno, la verdad que es un ORGULLO haber nacido aquí en Latinoamérica, cuando me pongo a pensar en esas gentes,