1 Nombre: Grozny 31-10-2025 (Fri) 17:25:59 [del]

Soñé
Soñé que salía de mi antigua escuela, ese lugar que ya no existe pero que sigue vivo en mi memoria como una ruina emocional. Afuera me esperaba una chica en moto. No recuerdo su rostro, pero su presencia era cálida, como si siempre hubiera estado ahí. Me subí detrás de ella y recorrimos mi país, cruzando calles que parecían hechas de recuerdos. El cielo era naranja, como si el tiempo estuviera a punto de acabarse. De pronto, sin transición, estábamos en China. No lo cuestioné. Ella me miró y dijo: “Vamos por el tren”.

Entramos a una estación de metro inmensa, subterránea, llena de gente que no hablaba mi idioma. Pero lo más extraño era que cada persona tenía un número flotando sobre su cabeza, como si fueran códigos. Algunos eran largos, otros cortos. Algunos se repetían. Yo tenía el 8437. Vi a otros con números parecidos: 8431, 8440, 8439. Me sentí menos solo por un momento, como si hubiera una lógica secreta detrás de todo.

Pero la chica… ella tenía 9151. Un número que no se parecía al mío ni al de nadie más. Era único. Como si no perteneciera a ese sistema. Como si fuera de otro plano. La seguí entre pasillos y escaleras, tratando de no perderla. Pero al entrar al vagón, la multitud nos separó. Grité su número, “9151!”, como si eso pudiera traerla de vuelta. Nadie me entendía. Empecé a pedir ayuda en inglés, desesperado. Todos me miraban como si hablara en código roto. Hasta que un hombre mayor, con ojos tranquilos y el número 0001 sobre su cabeza, se acercó y me dijo: “I understand you.”

Y en ese momento, me desperté. Con la sensación de que había algo que debía encontrar. O recordar. Tal vez 9151 no era solo un número. Tal vez era una puerta.