Una perra (no humana) y un gato (técnicamente es de mi hermana, pero siempre viene a que lo acaricie). En general, creo que me gustan más los perros, pero no voy a negar que los gatos son bastante lindos (aunque siempre dejan todo lleno de pelos).

En nuestro suelo, se ha venerado a las serpientes, al jaguar y a las aves. Aún hoy en carnavales las personas de firmes creencias arraigadas en las ancestrales prácticas precolombinas visten máscaras de esos animales para danzar con ellas.
También, desde luego, otros animales captaron la fascinación humana, como los monos o los perros. En otros lados del mundo, toros, elefantes, etcétera.
Los significados otorgados varían de cultura a cultura. Hay algunas piezas de cerámica donde hombres moribundos tienen un perro sobre sus pies, para que les transmita calor. También un perro, creo que su nombre está en nauatl acompaña y conduce a los muertos en su viaje al inframundo. Hace tiempo leí esto, y recordé a Cancerbero, que también estaba residiendo en un mundo debajo de éste. Anubis tiene cabeza de chacal, que es como un perro. Anubis, un dios vinculado a la muerte puesto que los chacales tenían la costumbre de frecuentar los cementerios.

En el arte teotihuacano los jaguares con frecuencia adquieren rasgos que los acercan a lo humano. Ya sea que se trate de felinos humanizados o de hombres disfrazados de jaguar.